Hoy en día Ford Motor Company utiliza en algunos de sus vehículos una tecnología llamada Tracción Total que mide la forma en que los neumáticos se adhieren al pavimento y así determina el ajuste de la distribución de par entre las ruedas delanteras y traseras en un tiempo muy rápido, que no sobrepasa los 20 milisegundos, lo que permite que los vehículos Ford EcoSport, Edge, Galaxy, Kuga, Mondeo y S-MAX puedan conseguir un equilibrio más seguro en la ruta.
Ahora la empresa norteamericana acaba de introducir una nueva tecnología basada en Inteligencia Artificial (IA) que permite un mayor agarre del vehículo en terrenos resbaladizos y además permite ahorrar gasolina cuando el vehículo requiere más adherencia al pavimento.
Esta nueva tecnología de desconexión de tracción a las cuatro ruedas introducida por Ford por primera vez en el nuevo Ford Edge, ofrece más de lo que ofrece la tecnología de Tracción Total.
Gracias a decenas de sensores de alta tecnología puede determinar en una fracción de segundo si el vehículo necesita tracción inteligente en las cuatro ruedas, además de ofrecer un ahorro del 6.5% cuando el vehículo solo opera con tracción delantera.
Si las condiciones del pavimento y conducción son buenas, el vehículo (Ford Edge) operará con tracción en las dos ruedas, lo que permite mejorar la eficiencia en el gasto de gasolina. En el caso en que las condiciones del pavimento y conducción cambien y se tornen más exigentes, el vehículo cambiará automáticamente a la tracción inteligente en las 4 ruedas.
Si bien el concepto de esta tecnología es muy simple, el supervisor de aplicaciones de motor de Ford, Scott Beiring, señaló que «el desafío fue la ejecución» de esta nueva tecnología. Beiring también agregó que «el cambio entre la tracción a las dos ruedas y la tracción a las cuatro ruedas debe ser lo suficientemente rápido y fluido como para que el cliente no sepa que está ocurriendo«.
Esta tecnología utiliza un cerebro electrónico que motoriza las entradas de los sistemas, entre los que se incluyen el sistema de control de tracción y el sistema de frenos antibloqueo para determinar el giro y deslizamiento de las ruedas, además también incluye los limpiaparabrisas y la temperatura exterior, necesarios para para determinar las condiciones climáticas y en caso de que el nuevo Ford Edge tire de un remolque, también utiliza los monitores.
El cerebro electrónico está controlado por un algoritmo que se basa en «lógica difusa» para procesar y analizar los datos de todos los sistemas y sensores en la mitad del tiempo que lo hace la tecnología de Tracción Total, sólo 10 milisegundos. En este corto tiempo determina cuando es óptimo utilizar la tracción inteligente en todas las ruedas o solo la tracción delantera.
Beiring explica la Lógica Difusa (algoritmo) de la siguiente manera,
Es como si tú o yo decidiéramos qué ropa ponernos basándonos en el pronóstico del tiempo, el lugar al que vamos, la época del año y mirar por la ventana. En el caso del nuevo Edge, el hecho de que los limpiaparabrisas estén encendidos no significa que la tracción inteligente a las cuatro ruedas se vaya a activar. El algoritmo toma decisiones basándose en una variedad de cosas que están sucediendo, pero mucho más rápido de lo que una persona podría procesar.
Si bien existen sistemas similares, Beiring afirma que: «Ninguno como este. La verdadera magia reside en el hecho de que podamos cambiar de tracción sin problemas y sin que intervenga el conductor«.