Google se encuentra en la fase de desarrollo de una característica innovadora para su navegador Chrome que promete reforzar el anonimato del usuario en la web.

Conocida como Protección de IP, esta función es la evolución de un proyecto anteriormente llamado Gnatcatcher. Su objetivo principal es mitigar los riesgos asociados con el rastreo entre sitios y el fingerprinting digital.

Según Brianna Goldstein del equipo de Chromium en un post de Chromium.org publicado en Grupos de Google, la función de Protección de IP será inicialmente una opción a la que los usuarios pueden optar por usarla, no vendrá activa en forma predeterminada.

Esta medida tiene como objetivo ofrecer control al usuario sobre su privacidad y permitir a Google monitorizar el comportamiento del usuario a volúmenes más manejables. Se prevé una implementación gradual, conscientes de que pueden surgir consideraciones regionales y técnicas que requieran ajustes.

Funcionamiento Técnico

La ingeniería detrás de Protección de IP es notablemente compleja. Utilizará servidores proxy para ocultar la dirección IP del usuario, impidiendo que los sitios web de destino recopilen esta información sensible.

Además, para abordar los casos legítimos que requieren direcciones IP, como el enrutamiento de tráfico y la prevención de fraudes, la función se aplicará únicamente a un conjunto específico de dominios de terceros identificados como rastreadores.

Fases de Implementación

Google planea desplegar esta función en varias fases. La primera, denominada Fase 0, utilizará un único servidor proxy propiedad de Google y solo redirigirá tráfico hacia dominios también propiedad de Google.

Esto limitará el impacto en otras empresas mientras se pone a prueba la robustez de la infraestructura. Lamentablemente en esta fase solo los usuarios con direcciones IP basadas en Estados Unidos podrán acceder a los servidores proxy durante esta etapa inicial.

Consideraciones de Seguridad

Es digno de mención que solo un pequeño porcentaje de usuarios se inscribirá automáticamente en esta fase inicial de pruebas.

Además, para acceder al servidor proxy, los usuarios deberán estar autenticados en Chrome. Google empleará un servidor de autenticación propio para otorgar tokens de acceso basados en un cupo por usuario, con el objetivo de prevenir abusos.

Desafíos y Limitaciones

Si bien Protección de IP es un paso audaz hacia una mayor privacidad en línea, también viene con sus propias limitaciones.

Entre esas limitaciones, existe la posibilidad de que podría afectar el rendimiento y la funcionalidad de ciertos sitios web y servicios.

Además, algo muy importante a tener en cuenta es que Google ha sido claro en establecer que esta función no reemplaza a un servicio VPN; no cifra el tráfico del usuario ni altera su ubicación geográfica.

En resumen, Protección de IP representa un esfuerzo significativo por parte de Google para mejorar la privacidad y la seguridad del usuario. Sin embargo, queda por verse cómo esta función se adaptará y evolucionará para satisfacer las diversas necesidades y preocupaciones tanto de los usuarios como de los propietarios de sitios web.