Quizás para algunos la red Wi-Fi hogareña no llega a ser tan importante como un servicio básico como la electricidad, el agua o el gas, pero cada vez se acerca más por diversos factores y entre esos factores tenemos el entretenimiento, el trabajo y la educación, por nombrar algunos.
Para otros pensar que se pueden quedar sin conexión a la red ya no es una posibilidad pues dependen de la red, como también dependen de tener una conexión confiable, rápida, que no interrumpa lo que están haciendo.
De acuerdo a Google un estudio reciente que le encomendaron a Kelton Research, develó que el 28% de las personas no creen que puedan durar un solo día sin WiFi. Otra de la cosas que descubrieron fue que el 81% de los encuestados habían experimentado problemas con su Wi-Fi hogareño.
Muchos de esos problemas se pueden solucionar como por ejemplo tiempos de carga lentos, problemas al tratar de conectarse a la red y hasta problemas de seguridad.
A continuación tenemos 5 consejos para mejorar el WiFi hogareño ofrecidos por el Gerente de Producto de Google WiFi, Sanjay Noronha:
Coloque su enrutador lo más cerca posible del centro del hogar:
Las señales Wi-Fi se debilitan cuanto más se aleja de su enrutador, por lo que si mantienes ek enrutador junto a la puerta principal, tus vídeos podrían cargarse más lentamente si intentas verlos en la puerta trasera. Entonces si puedes, coloca tu enrutador de la manera más central posible dentro de tu hogar, aunque esto no siempre será posible dependiendo de dónde el proveedor de Internet ofrece la conexión principal. Y si no te importa que tu enrutador se encuentre en la encimera, déjalo a la vista. Si puedes evitar esconderlo en una estantería o archivo, realmente esto puede ayudar a aumentar la señal Wi-Fi.
Considere una red de malla:
Una red de malla es un grupo de enrutadores que se comunican de forma inalámbrica entre sí para crear una única red Wi-Fi conectada en un área grande. Este tipo de red permite tener múltiples fuentes de Wi-Fi de gran alcance en toda la casa, no solo una del enrutador principal. Tener una red de malla resuelve el problema de tener el enrutador simplemente relegado a una esquina de la casa. Creamos Google Wifi como un sistema de malla porque tener varios puntos que trabajan juntos permiten crear una red única sin interrupciones que brinda una cobertura sólida y consistente para todos los dispositivos conectados en cada habitación de la casa.
Asegúrese de que su enrutador esté actualizado.
Si tu enrutador actual tiene más de tres o cuatro años, verifica que sea compatible con señales Wi-Fi de 5 GHz. Algunos enrutadores más antiguos solo admiten señales de 2.4GHz, lo que puede hacer que los dispositivos trabajen mucho más lentos. Piensa en ello como si tuvieras un automóvil que no sea lo suficientemente rápido para conducir en la autopista. Actualiza tu enrutador al menos con un sistema 802.11ac para que también pueda usar frecuencias de 5 GHz, que son como una autopista de Wi-Fi (con más carriles y límites de velocidad más altos).
Siempre, siempre tenga su red protegida con contraseña:
Puede parecer conveniente tener una «red abierta» sin contraseña, ya que no es necesario recordar una contraseña complicada. Pero si haces eso, cualquiera que conduzca hasta tu casa podría unirse a tu WiFi y comprometer a esa red, a los dispositivos y a los datos o ralentizar la red. Elija una contraseña segura que sea difícil de adivinar para todos, pero fácil de recordar.
Cree una red Wi-Fi separada para las visitas.
Si tienes niños en casa o simplemente recibes muchos invitados, es probable que hayas ofrecido muchas veces la contraseña de la red Wi-Fi. La configuración de una red de visitas crea una segunda red Wi-Fi en el hogar para que los invitados puedan tener una gran experiencia mientras los propios dispositivos del hogar permanecen seguros y privados.