Hoy más temprano en un artículo sobre vehículos eléctricos nombraba al primer vehículo de este tipo que probé en el 2015, el Kia Soul EV, con el cual tuve un pequeño momento gracioso cuando intenté arrancarlo por primera vez.  En ese momento parecía como que nada sucedía, ningún ruido, nada y yo esperando el arranque del motor sin pensar que era un auto con motor eléctrico, por suerte en unos segundos reaccioné me reí.

Lo anterior sucede con los vehículos eléctricos y en cierta medida con los híbridos, que si bien incluyen un motor eléctrico, también incluyen un motor de gasolina y dependiendo del vehículo también son muy silenciosos al momento de arrancar el motor.

Luego con el andar, eléctricos e híbridos, sin pensar en los motores, pueden presentar ruidos que pueden provenir de la ruta, las ruedas y de otras partes como por ejemplo la suspensión y es en esto último en lo que Lexus pensó cuando desarrolló el nuevo Lexus ES 300h Híbrido, preocupándose por el diseño y estructura de la suspensión, para tratar de elevar al máximo la quietud y disminuir también al máximo el ruido que puede provocar.

En este aspecto Lexus desarrolló un nuevo tipo de amortiguador con una válvula oscilante y una válvula de velocidad ultra lenta, algo que al momento de detectar hasta el más mínimo movimiento de la ruedas y de la suspensión, ofrece la aplicación de la fuerza de amortiguación, lo que da como resultado quietud, silencio y por supuesto estabilidad, cualquiera sea la velocidad.

Lexus explica que el sistema del nuevo amortiguador no tiene precedente en la industria automotriz a nivel global.  El amortiguador es capaz ofrecer estabilidad, quietud y silencio por la forma en que el aceite circula dentro de la nueva disposición de las válvulas del mismo.

El nuevo amortiguador del ES 300h cuenta con una válvula principal y otra de velocidad ultra lenta, la cual permite que el aceite circule lentamente y cuando el aceite circula entre velocidades bajas y altas, la válvula principal se abre, suprimiendo de esta forma la fuerza de amortiguación y así ofrecer un andar mucho más suave que se obtiene con otros amortiguadores.

De acuerdo a la empresa japonesa, la estabilidad del Lexus ES 300h también tiene que ver con el desarrollo del nuevo diseño de su suspensión trasera de doble triángulo, la cual tiene colocados los ejes de salida del sistema con la máxima precisión, lo que ofrece una rigidez única a la estructura.  Esto les permite obtener un resultado excelente a cualquier reacción del conductor al volante y por supuesto una estabilidad única.

Lexus comenta que cuando evaluaron el funcionamiento de este nuevo vehículo, pruebas que se desarrollaron en Europa, tuvieron distintos tipos de pavimento y vías, entre las cuales se incluyen las carreteras alemanas sin límite de velocidad, carreteras sinuosas en plena montaña y calles de ciudad con distintos pavimentos e irregularidades.  Por supuesto que también probaron en circuitos como el emblemático circuito de Nürburgring.

Por último Lexus nos explica que para no quitar espacio al baúl, tuvieron que instalar los amortiguadores más cerca de la parte de atrás de la segunda fila de asientos y separados de los resortes helicoidales.