La Unión de Libertades Civiles Americanas (ACLU por sus siglas en inglés) este fin de semana recibió 24 millones de dólares de más de 355.000 donaciones hechas en línea con el propósito de ayudar a los inmigrantes afectados por la orden ejecutiva firmada por el Presidente Trump el viernes pasado, que prohíbe la entrada al país de personas provenientes de 7 países donde la mayoría de los ciudadanos son musulmanes.
Esa cifra de dinero donado para ayudar a los perjudicados por esta prohibición es todo un récord de donaciones para esta entidad, pero no será todo lo que será destinado a esta ayuda.
Update: the @ACLU just ran the numbers again. Spokesman says the group received 356,306 online donations totaling $24,164,691 this weekend.
— Brian Stelter (@brianstelter) January 30, 2017
Uber creó un fondo para defensa legal de 3 millones de dólares para ayudar a los conductores con problemas de inmigración, además proveerán ayuda legal para los conductores que se encuentran fuera de los Estados Unidos y tengan problemas para regresar al país.
La competencia de Uber, Lyft, ha prometido a ACLU la donación de 1 millón de dólares durante los próximos 4 años para ayudar en la lucha contra esta prohibición.
Por su parte Google también ha creado un fondo de 2 millones de dólares para ayudar a las personas afectadas por esta orden ejecutiva y esa cifra puede ser igualada en donaciones de los propios empleados de la empresa. La cifra que recauden será repartida entra ACLU, el Immigrant Legal Resource Center, el International Rescue Committee y el Mercy Corps.
Además del dinero donado, cientos de abogados especializados en inmigración están ofreciendo sus servicios en forma totalmente gratuita para ayudar a los damnificados por esta orden ejecutiva. Este fin de semana que acaba de terminar en el aeropuerto de internacional Dallas/Fort Worth, aquí cerca de casa, se hicieron presentes más de 100 abogados para ayudar en esta causa, trabajando todo el fin de semana para que liberen a los inmigrantes detenidos, varios de los cuales son residentes legales de Estados Unidos.