21 noviembre 2024

Finalmente Twitter lanza la autenticación en dos pasos

Market-St.-_Twitter_headquarters

Hacia fines de Abril pasado les comenté que Twitter ya estaba probando internamente un sistema de autenticación en dos pasos para mejorar la seguridad.  Las pruebas terminaron y hoy Twitter acaba de lanzar ese sistema de verificación de dos pasos.

Este sistema trabaja conectándose normalmente con sus credenciales de Twitter como lo hacían hasta ahora y luego tienen otra verificación más, que consiste en ingresar un código que Twitter les enviará por SMS cada vez que se quieran conectar al servicio.

twitter-login-verification

Para activar este sistema deben de conectarse a Twitter.com, entrar en Configuración, seleccionan «Requerir un código de verificación cuando me conecto» (o similar a esa frase), clic en el enlace que dice «Agregar un teléfono» y luego deben de seguir las instrucciones que aparecen en pantalla.

Cuando terminan todos los pasos anteriores, deberán ingresar un código de 6 dígitos que Twitter les enviará a su celular vía SMS.  A partir de ese momento, el sistema de verificación de dos pasos ya esta activado.

Las aplicaciones que utilizan seguirán trabajando normalmente, esta característica no las afecta.

Como se imaginarán, es muy similar a los sistemas de autenticación en dos pasos de Google y Facebook.

[Fuente Twitter Blog]

Siguenos por Twitter a través de @Geeksroom y no te pierdas todas las noticias, cursos gratuitos y demás artículos. También puedes seguirnos a través de nuestro canal de Youtube para ver nuestros vídeos, a través de Instagram para ver nuestras imágenes! O vía Bluesky si ya estás cansado de Twitter

Hector Russo

Desde su juventud se ha dedicado a la Tecnología de la Información. En su oportunidad fue incluido por Ivy Worldwide en su lista Top 25 influencers en Tecnología. Actualmente es miembro del panel de jurados que elige los mejores vehículos del año para el mercado hispano de Estados Unidos, a través de los Hispanic Motor Press Awards.

Ver todas las entradas de Hector Russo →