Brian Doom comenta que en el 2002 se le ocurrió crear un cubo de Rubik para poder conocer que es lo que se encontraba en la cara opuesta del cubo y las otras caras, sin necesidad de voltear el cubo, como normalmente hacemos cuando estamos tratando de resolverlo.
También comenta que además de eso sirve para usarlo en la oscuridad, pero lo más importante es que puede llegar a servir para personas no videntes, sin sacrificar la facilidad de uso para personas que no tienen este problema.
Quizás pensarán que lo puede hacer con letras del alfabeto Braille, pero Doom explica que una sola vuelta y un carácter Braille dado se lee como una letra diferente, además la lectura de este alfabeto hacia atrás en el reverso de un cubo es complicada.
Cada cara del cubo tiene un color único, aunque sí cambió el color naranja por negro, para las personas que quizás con poca vista puedan confundir el color naranja con el rojo. Además cada cara también tiene su forma y textura, diferente a las otras caras.
No es difícil hacerlo, solo hay que conseguir las piezas, un buen pegamento y lo podemos construir muy fácilmente.
[Fuente Neatorama]