Los termostatos manejan la calefacción y refrigeración de una casa. Y en tiempos que debemos ser más cuidadosos con el medio ambiente podemos reemplazar un termostato común por uno que aprende todo el tiempo las distintas temperaturas con los que vamos configurándolo a lo largo de nuestro largo día.

Controlando el uso de nuestros sistemas, podremos ahorrar hasta un 20 % de los gastos de la cuenta de luz al final del mes. Además podrás controlarlo a distancia, a través de internet, mediante un teléfono inteligente, tablet o computadora.

Y aunque muchos termostatos podrían programarse, más del 90 % de los usuarios no lo hace. Por eso se diseñó este aparato que aprende solo. Y mediante sofisticados algoritmos, va programando un esquema con tus horarios, cuando te acuestas, cuando sales y pronto no tendrás que modificarlo más pues va aprendiendo con cada modificación.

Fijate cómo funciona:

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