Los gobiernos del mundo están sufriendo por estos días, el problema del fin del neoliberalismo. Se suceden revueltas sociales por todos lados. Y lamentablemente, las autoridades en vez de fijarse en el porqué suceden, atacan a las redes sociales por facilitar el agrupamiento y la comunicación de los jóvenes. Quedaron en la historia, el beneplácito con el que trataban a los héroes de Egipto, liderado por un empleado de Google, que derrocó al gobierno de turno.

También quedaron atrás, las acusaciones a China, por querer censurar su red.

Cuán fácil resulta señalar la viga en el ojo ajeno que la paja en el propio.

La empresa Blackberry, que posee casi un tercio de los teléfonos inteligentes de los jóvenes londinenses ha tenido que salir a decir que se pone a disposición para bloquear estas comunicaciones privadas. El programa preferido ha sido el Blackberry Messenger.

¿Y la libertad de expresión, el la libertad de comunicación y la libertad para protestar ? se dan cuenta que garantizar los derechos humanos tiene un límite muy difuso, que los gobiernos se atreven a cercenar ni bien asoman los primeros problemas económicos y sociales en sus propios patios traseros?  No se dan cuenta que lo que hay que solucionar, es el problema económico y no embestir contra los más débiles.

Después que nos acusen a los países del tercer mundo, de incivilizados.

Si quieres probar el Blackberry Messenger, te dejo la dirección de descarga: BBM