De acuerdo a un reporte de la publicación The New York Times publicado hoy, una aplicación de la empresa Cleaview AI está siendo utilizada por cientos de agencias policiales de Estados Unidos, incluido el FBI y con la misma con solo una imagen de una persona, pueden averiguar su nombre, domicilio y otros datos personales.

Por supuesto que esta aplicación es solo disponible para organismos de seguridad, no está disponible para el público, aunque no para siempre, ya que de acuerdo a algunos oficiales de policía y también algunos inversores del startup, en un futuro piensan que si estará disponible para para el público.

La aplicación trabaja utilizando una imagen de una persona, la cual compara con una base de datos de más de 3.000 millones de imágenes que de acuerdo a esa startup, obtuvo de Facebook, YouTube y otros sitios.

Una vez que encuentra algunas coincidencias entre la imagen y algunas fotos de su base de datos, ofrece un listado con ambas fotos y con enlaces a los sitios donde aparecieron originalmente esas fotos de la base de datos, lo que permite hallar muchos de los datos de la persona.

De acuerdo al NYT la cantidad de entradas en la base de datos de Clearview es tan grande que ridiculiza las bases de datos usada por los distintos departamentos de la policía y hasta la base de datos del FBI que es la más grande de todas (utilizan fotos de pasaportes y licencias de conducir) con un poco más de 640 millones de imágenes de personas en Estados Unidos.  Parece que por el número de imágenes tienen más de una imagen por persona, ya que aquí en Estados Unidos la población es de un poco más de 300 millones de personas.

El NYT también señala que la aplicación ayudó a resolver muchos crímenes como asesinatos, robo de tiendas y otros casos.

Lamentablemente y de acuerdo a organismos defensores de la privacidad, esta aplicación podría devolver falsos positivos lo que podría poner en riesgo la seguridad de algunas personas y ni que hablar de la vigilancia masiva.

Además esta aplicación en manos del público podría ser usada por acosadores y otros criminales.

Algunas ciudades ya han prohibido el uso de reconocimiento facial y una de esas ciudades es San Francisco, en California.  También el Congreso de Estados Unidos está investigando sobre este tema.  Probablemente en las próximas semanas y meses surgirá más información al respecto y no es algo que quedará en la nado, al contrario, probablemente surgirán algunas demandas de organismos defensores de la privacidad.