La semana pasada presenté una nota sobre redes sociales que generó varias expectativas. Desde las razonables y plausibles hasta aquellas que riñen con el sentido común. Pero lo vamos a dejar ahí. Aprendí que una vez que escribes algo y lo publicas, ese es tu trabajo. Eso es todo.
Hoy nuevamente voy a referirme a la desaparición de otra red social, no una cualquiera. En retrospectiva de acuerdo a dos periodistas del The Atlantic, Twitter se ha venido deteriorando año a año. Del 2013 al 2008 han habido cambios degenerativos en la red social.
En un principio asumías que alguien estaba poniendo atención a lo que publicabas en 140 caracteres. Creías –yo lo sigo creyendo, que tus tuits bien preparados y meditados incrementarían tu número de seguidores. Y creías que había una audiencia mayor a la de tu timeline que algún día podrías tu también seguir.
Lo que nos dice todo esto es que tal como está Twitter también puede desaparecer, porque simplemente hay algo que no está bien.
Las ganancias de Twitter el último trimestre mejoraron respecto al período anterior, y se agregaron 14 millones de nuevos usuarios de un total de 255 millones. Lo que preocupa es que sus usuarios ahora están menos activos de lo que acostumbraban.
Por supuesto que debido a la popularidad de Twitter varios en la red ya han refutado el articulo de The Atlantic.
Las redes sociales generan adicción y nos permiten malgastar el tiempo horriblemente si no se utilizan con moderación. Lo mismo sucede con Twitter. Es decir, el problema no son las redes como tales sino el uso que les estamos dando.
Las redes sociales generan adicción y conllevan al aburrimiento
Piense. No es el caso que usted necesita estar mirando a cada momento su smartphone solo para saber si alguien le escribió, envió un texto o llamó? Verdad que sí. Esa sensación, ese prurito de querer estar conectado todo el tiempo puede tipificarse como adicción (No soy psicólogo) y ese estado de urgencia le lleva a aburrirse cuando no encuentra nada en su celular.
A mi me ocurre mucho con Facebook. Me distraigo muy pronto y eso me hace olvidarme de mis subscripciones en RSS. Sin embargo yo estoy seguro que mañana esos feeds aún estarán ahí. Lo mismo que con un correo electrónico, con un libro, una revista; no me desespero y controlo el tiempo que voy a quedarme.
En lo atinente a Twitter, incluso para los periodistas, va perdiendo la novedad y la concepción de que todos están en Twitter ya no la cree nadie. Mientras más gente va a Twitter, más ruido se produce y la decepción de muchos radica en eso, en la imposibilidad de filtrar los tuit irrelevantes. No hablemos siquiera del spam. Las cuentas de las figuras más visibles en los medios, una vez que tienen varios miles de seguidores, simplemente se abandonan, y se leen tuits automatizados o simplemente los enlaces que se publican.
A usuarios como los descritos solo les interesa sus propios contactos, con ellos conversan y responden a tuits. El resto es ignorado.
El problema no parece ser Twiter, sino uno mismo
No recuerdo exactamente cuando pero una vez me preguntaron si era una persona o un robot. La razón que mi cuenta[eng] está llena más de enlaces que de conversaciones personales. Dependiendo de varias circunstancias Twitter puede ser algo valioso o algo aburrido. Pero, ¿es Twitter, o es la forma como yo lo utilizo?
Son varios años que vivo en la red. Y muchas cosas han cambiado, especialmente después de la sobrevaloración de las compañías en Silicon Valley. Personalmente no me gustaría que Twitter desaparezca, pero si llega a suceder, habré yo también contribuído a ello.
Como todo servicio si las expectativas del usuario no se satisfacen, quién necesita el servicio! Varios usuarios con los que intercambiaba información y conversaciones ya no están. Para ellos Twitter ya no es importante, algo mejor que Twitter atrajo su atención.
No leo todo lo que se debe leer pero creo que es la primera vez que tengo información de la desaparición de twitter. Adrienne Lafrance y Robinson Meyer hacen un muy atrevido vaticinio. No tengo problema en desaparecerme de la red, ya lo he probado. Ganas una inmensidad de tiempo para otras cosas. Unos le llaman desintoxicación.
Estoy plenamente seguro que cuando regrese, si es que regreso, la vida es efímera, Twitter estará ahí. Mis contactos, mis amigos y mis seguidores también lo estarán. Pero las conexiones que he hecho, el aprendizaje desarrollado, hacen que siempre quiera regresar a Twitter. Y así lo seguiré haciendo.
Interesante planteamiento el que haces en este artículo, aunque creo que en determinado momento la gente también se da cuenta que las redes no son la única vida social existente…