Según Symantec, los creadores del virus Flame han enviado un comando a las máquinas comprometidas para destruirlo y así borrarlo completamente de esos ordenadores.
El motivo es tratar de cubrir todas las huellas posibles y así no dejar pruebas que puedan descubrir el origen del virus en la investigación.
Como es conocido, el virus Flame atacó ordenadores del Medio Este y África del Norte, aunque se cree que el objetivo específico era Irán.
Según el gerente de Seguridad de Symantec, Vikram Thakur,
«Ellos están tratando de cubrir sus huellas de cualquier forma que puedan»
«Pero lo que es más interesante es que ellos estaban dispuestos a asumir el riesgo de conectarse a los servidores, los que podrían ser vistos»
[Fuente Tech Radar]