La nueva Lexus IS 500 Ultimate Edition 2025 celebra 25 años del sedán con solo 500 unidades, motor V8 atmosférico de 472 hp y un diseño exclusivo “Wind”.
En un mercado en el que los motores de gran cilindrada son ya especie en extinción, Lexus se reserva un último cartucho para los puristas: la IS 500 Ultimate Edition 2025, una serie especial de solo 500 unidades para Norteamérica que se pondrá a la venta este otoño.
La propia marca la define como “la culminación de la grandeza”, y no exagera: será uno de los pocos sedanes premium que todavía ofrezcan un V8 atmosférico en pleno 2025.
Veintiséis años de historia, 1,3 millones de unidades
Desde su lanzamiento en 1999, la familia IS ha colocado aproximadamente 1,3 millones de coches en más de 40 países. El modelo nació para plantar cara a los compactos deportivos alemanes—léase BMW Serie 3 o Mercedes-Benz C-Class—y durante dos décadas ha sido el laboratorio de Lexus para pulir su concepto de “diversión al volante” con propulsión trasera, chasis rígido y motores briosos.
La Ultimate Edition se concibe como tributo a esa trayectoria y, de paso, como despedida a uno de los últimos V8 de aspiración natural que quedan en la gama. Mientras la industria se electrifica a marchas forzadas, en Lexus han decidido que el canto del cisne merecía una edición numerada y cargada de detalles artesanales.

Mecánica: V8 de raza sin turbos ni filtros
Bajo el capó late el archiconocido 5.0 litros 2UR-GSE, un ocho cilindros en V que entrega 472 hp y 395 lb-ft de par sin ayuda de sobrealimentación.
La potencia viaja al eje posterior a través de una caja automática Sport Direct Shift de ocho marchas con levas, lo que garantiza la mezcla justa de confort en ciudad y contundencia cuando la carretera se abre. Lexus no ha publicado cifras oficiales de aceleración, pero baste recordar que el IS 500 estándar ya roza los 4,5 s en el 0-60 mph.
Chasis y frenos dignos de circuito
Una edición llamada “Ultimate” no podía quedarse en lo cosmético. Por eso se incorporan discos ventilados de 380 mm mordidos por pinzas Brembo® de seis pistones—pintadas en rojo exclusivo—y llantas forjadas BBS de 19 pulgadas con acabado mate negro, más ligeras y rígidas que las de serie.
Todo ello contribuye a mejorar la capacidad de frenada y a reducir la masa no suspendida, clave para que el sedán se mantenga plantado en curva aunque el asfalto se retuerza.
Nueva piel “Wind” y detalles que hablan de velocidad
La carrocería estrena el tono Wind, un gris metalizado claro creado en exclusiva para la gama F SPORT. La idea, según la marca, es que el color “sugiera agilidad y movimiento incluso en parado”.
Los acentos en negro brillante, las llantas oscuras y la postura baja refuerzan esa impresión de berlina lista para devorar rectas y enlazar eses. El resultado visual recuerda a un concept-car de salón, pero con matrícula.
Cabina Circuit Red: lujo con pulso racing
Abrir la puerta es encontrarse con un habitáculo que mezcla NuLuxe y Ultrasuede en un binomio de Circuit Red y negro. Volante y pomo replican el patrón perforado del superdeportivo LFA, mientras que los cinturones rojos y la placa numerada en la consola dejan claro que no estamos ante un IS común. Hasta el reloj analógico lleva un fondo de varias capas grabado con láser en rojo, guiño a la obsesión nipona por el detalle.
Para completar la puesta en escena, la pantalla TFT de 8 pulgadas arranca con una animación exclusiva “Ultimate Edition”, un pequeño teatro digital que anticipa la experiencia antes incluso de tocar el acelerador.
El sello Shimoyama: cuando el ingeniero en jefe manda
Bajo la filosofía Lexus Driving Signature, cada modelo se afina en el exigente Centro Técnico de Shimoyama, un trazado de pruebas que replica curvas del Nürburgring y carreteras de montaña japonesas.
Allí, el ingeniero en jefe se pone al volante, identifica los matices de dirección, frenada y balance y ordena cambios hasta que el coche cumpla con tres mandamientos: respuesta lineal, confianza al límite y comodidad de marcha.
La Ultimate Edition no escapa a ese ritual, de modo que las mejoras de rigidez y suspensión—aunque Lexus no detalla cifras—prometen un extra de tacto sin sacrificar la suavidad que esperan los clientes de lujo.
Seguridad a la última con Lexus Safety System+ 2.5
La edición especial incorpora de serie el Lexus Safety System+ 2.5, un paquete que agrupa:
- Pre-Collision System con detección de peatones y ciclistas;
- Emergency Steer Assist para estabilizar maniobras de evasión;
- Detección y frenado en giros a la izquierda ante tráfico de frente;
- Dynamic Radar Cruise Control con función stop-&-go;
- Lane Tracing Assist y Lane Departure Alert con corrección de dirección;
- Road Sign Assist que replica señalización en el cuadro;
- Automáticas de luces altas que alternan según tráfico.
Todo el abanico trabaja con radar y cámara para reducir la fatiga y prevenir despistes, claves en un sedán pensado tanto para el commute diario como para escapadas de fin de semana.
Comercialización y precio: misterio con fecha de caducidad
Lexus ha confirmado que las 500 unidades llegarán a los concesionarios norteamericanos “más avanzado el otoño”, pero no ha desvelado MSRP. A modo orientativo, el IS 500 F SPORT Performance 2024 arranca en torno a los 60 000 dólares; cabe esperar que la Ultimate Edition suba varios escalones, impulsada por la pintura exclusiva, las llantas forjadas y la producción limitada.
Para los coleccionistas, el dilema será sencillo: moverse rápido o quedarse sin ejemplar. Lexus no ha anunciado reservas on-line, de modo que el pulso se librará en los showrooms, donde cada comprador recibirá un número de serie grabado en el interior.
Contexto: el futuro eléctrico asoma por el retrovisor
La firma de lujo de Toyota lleva años anunciando que, antes de terminar la década, su gama será mayoritariamente electrificada. Mientras el SUV RZ eléctrico o los híbridos enchufables NX y RX acaparan titulares, la IS 500 Ultimate Edition emerge como la foto final de una era en la que el sonido de ocho cilindros marcaba el carácter de un coche.
Con la IS 500 Ultimate Edition, Lexus cierra el círculo que empezó en 1999: un sedán compacto, pero rabiosamente deportivo, capaz de rivalizar con los gigantes europeos y, de paso, conquistar a los entusiastas que aún vibran con un V8 a la vieja usanza.
Quedan pocos como él y, tras estas 500 unidades, quizá no vuelva a haber ninguno. Así que si alguna vez quisiste un Lexus atmosférico con pedigree, el reloj corre: la última gran función ya ha empezado.