Un grupo de científicos que está trabajando en una nueva vacuna contra el virus Ebola, acaba de publicar un estudio en Lancet, en el que revelan que pruebas llevadas a cabo en Guinea vacunando a personas con rVSV-ZEBOV, luego de haber entrado en contacto directo con otros pacientes de Ebola, ninguno de ellos contrajo el virus.
Entre el 2014 y este año, se produjo el mayor brote epidémico de la enfermedad por el virus de Ebola en varios países del oeste de África y otros. El mismo tuvo su origen en el 2013 en Guinea y luego se extendió a Sierra Leona, Liberia, Nigeria, Senegal, Estados Unidos (aquí en Dallas hubo 3 casos), España, Malí y Reino Unido.
En ese brote epidémico se calcula que murieron más de 10.000 personas, por lo que los estudios y desarrollo de esta vacuna se aceleraron más de lo que normalmente lleva el desarrollo y prueba de otras vacunas.
La nueva vacuna también fue probada con personas en Sierra Leona y fue tan efectiva que las pruebas con el grupo de control fueron detenidas temprano en Guinea, permitiendo que todos los expuestos a la enfermedad fueran vacunados.
En Guinea las pruebas se realizaron con un total de 5.837 personas, que fueron divididos en dos grupos. La efectividad del 100% se dio en el grupo de prueba que luego de entrar en contacto con enfermos de Ebola recibieron inmediatamente la vacuna. Al otro grupo de prueba se le suministró la vacuna 3 semanas después, lo que lamentablemente provocó que 23 personas contrajeron el virus de esta terrible y mortífera enfermedad.
Las pruebas fueron patrocinadas por varias organizaciones, entre las que se encuentran WHO y los gobiernos de Noruega y Canadá.
El laboratorio que se encargará de producir la vacuna será Merck and Co., que ya obtuvo los permisos para continuar con los procedimientos de licencias en Europa y Estados Unidos, aunque por ahora no se sabe cuando comenzarán la producción en masa de la vacuna.