Durante horas críticas, poco después del cobarde ataque en la ciudad de Bruselas, los servicios de emergencia, incluida la policía, se vieron obligados a usar Whatsapp ya que los sistemas de comunicaciones no dieron abasto para gestionar todo el tráfico que se produjo en esas horas.
La redes móviles en Bruselas rápidamente se vieron saturadas por el creciente número de llamadas y SNSs que se produjo luego del atentado, lo que a su vez produjo interrupciones en el servicio, lo cual perjudicó la red federal de comunicaciones ASTRID, que es utilizada por los servicios de emergencia.
De acuerdo a un oficial de policía de Nieuwsblad, las llamadas por pedidos de auxilio no entraban y nadie sabía que debía hacer. «Afortunadamente, Whatsapp seguía trabajando. Sin la aplicación no hubiéramos podido comunicarnos en absoluto«.
Todo esto fue confirmado en un comunicado de las autoridades de ASTRID que opera la red de comunicaciones de radio, incluida una serie de salas de control y una red de búsqueda personal. El comunicado de ASTRID indica que varias torres de radio en la zona afectada por los cobardes ataques se vieron saturadas por la demanda.
Entre otras cosas, en el comunicado ASTRID siguiente,
La red de radio no falló a nivel nacional, pero experimentó graves problemas de capacidad en especial en la región de Bruselas…
Poco después de los ataques, las torres de Astrid llegaron a su máxima capacidad, que como resultado dificultaron las comunicaciones durante varias horas críticas.