La cirugía cardiaca robótica es un gran avance en el campo de la cirugía cardíaca mínimamente invasiva, misma que permite llevar a cabo ese procedimiento a través de incisiones mínimas gracias a la ayuda de un sistema robótico, en la que un cirujano especialmente capacitado y experimentado, manipula los brazos del robot de forma remota a través de una consola.
Los médicos del Hospital Albert Einstein (HIAE), parte de una sociedad israelita en Sao Paulo, la semana pasada realizó una cirugía de corazón sin precedentes en América Latina. Se utilizó un robot para hacer una cirugía de bypass – sin necesidad de abrir el pecho del paciente.
Con un brazo robótico que posee una cámara en miniatura y que se inserta en el pecho del paciente, el médico puede llegar al corazón sin necesidad de utilizar los métodos tradicionales, por lo que sólo se necesitan cuatro pequeños orificios (4 cm) en el pecho. El robot permite la captura de imágenes en alta definición, con aumento 10x y en tres dimensiones. De esta manera el médico puede realizar movimientos precisos.
El robot no pretende sustituir el cirujano, sino que tiene como objetivo aumentar la capacidad humana para realizar ciertos movimientos con la mayor precisión quirúrgica: los brazos robóticos controlados por el cirujano permiten una alta sensibilidad y precisión, ya que el sistema elimina cualquier temblor en el pulso como usualmente ocurre con el ser humano.
Una cirugía tradicional de corazón abierto requiere de al menos 60 días de recuperación, con una técnica menos agresiva, el tiempo de recuperación del paciente disminuye de 60 a sólo 10 días. Evitando así el sangrado, así como las arritmias e infecciones colaterales. «Esta técnica permite una mejor visualización de los órganos, ya que vemos el corazón a través del video en una escala más amplia y con mayor claridad», dijo el Dr. Robinson Poffo, cirujano cardíaco y Coordinador de Cirugía Cardiaca Mínimamente Invasiva en el HIAE.
El vigilante Alvacir Silveira fue uno de los primeros beneficiarios. Y desconocemos quien pagó los costos de dicha cirugía.
La cirugía cardiaca asistida por video mínimamente invasiva ya es utilizada por más de diez años en Europa y los Estados Unidos y a Brasil llegó en el año 2006, precisamente impulsada por el médico Poffo.
[Fuente HIAE]