Es casi imposible ignorar el vínculo entre la política y la tecnología. Esto porque el presidente Barack Obama al medio día de hoy sostendrá una reunión con el público a través del medio más popular del momento, Facebook.
El Presidente hablará de las duras medidas que todos los norteamericanos deben realizar con el fin de llevar la economía fiscal a un nivel de mayor responsabilidad pero sin dejar de invertir en innovación.
El Facebook Live de la compañía en Palo Alto que tendrá como anfitrión al Presidente de los Estados Unidos, es una estrategia que beneficia a los dos. Barack Obama hablará directamente con sus potenciales electores, mientras que Facebook obtendrá una validación increíble.
Mientras es un honor tener como invitado a un presidente, compañías grandes atraen grandes públicos y es entendible que no respalden a ningún partido. Los CEOs requieren poder dialogar con quienquiera en el poder y las administraciones cambian frecuentemente.
Pero para los que gustan entremeterse en política, Facebook tiene amigos en ambos bandos. Entre los políticos que ya han visitado el centro de operaciones de la compañía están el ex-president George W. Bush, el Alcalde de la ciudad de Nueva York, Michael Bloomberg, el Senador John Cornyn (R-Texas), el Senador John Kerry (D-Mass.) y el Congresista Justin Amash (R-Mich.)
Las buenas relaciones entre el actual gobierno norteamericano y Facebook tampoco son nuevas. El pasado mes de febrero una cena entre hombres de negocios, entre ellos Mark Zuckerberg, y el presidente Obama fue un tema que recogió grandes titulares.
Para los expertos en estos temas, el acercamiento entre Obama-Facebook es muy riesgoso en términos de negocios para la exitosa compañía. Sus detractores creen que Facebook debería evitar mostrar sus favoritos. Para la gente de la red social, el que figuras políticas utilicen Facebook para organizar y conectar con la gente en una forma directa, personal y simple es algo que les halaga.
Pero Facebook trata a pesar de todo de mantener el balance. Sus oficinas en Washington D.C. por ejemplo, tienen conexiones con las administraciones de Obama y Bush. La compañía recientemente contrató a Marne Levine, ex-jefe del Consejo Económico de la actual administración, como su nueva vice presidenta de sus políticas públicas globales.
Pero también contrató a Cathie Martin, una asesora de alto nivel tanto de Bush como de Cheney, como su directora de política pública. Hacer alianzas de alto nivel es peligroso para las grandes compañías? La respuesta es sí y no. Pero las explicaciones nos gustaría escucharlas de ustedes amigos lectores.
[Fuente Politico][Imagen CC The White House]