El señor Raymon McLaren de 73 años es de los que piensan que «más vale tarde que nunca», aunque en su caso el tarde significó más de 50 años. McLaren pidió prestado un libro de la biblioteca Newcastle en Nueva Gales del Sur en 1957 y hasta hace poco decidió devolverlo.
Como en toda biblioteca, hay una multa por cada día de retraso, por eso al devolverlo, los 19.350 días de retraso en la devolución del libro se traducían en 5.000 dólares. Poco dinero (según él) para demostrar que era una persona honrada.
Con una tímida risa confiesa además que gracias a ese libro aprendió a sus 19 años, los primeros conocimientos que le permitieron tener la exitosa empresa que hoy tiene.
«Con el libro aprendí sobre nudos, fabricación de cuerdas y tejidos (…) lo he tenido por 53 años y de vez en cuanto lo consultaba»
El libro fue devuelto junto a un cheque de 5 mil dólares. Voceros de las bibliotecas nacionales afirmaron que en más de 20 años nunca habían sabido de un caso similar y mucho menos del pago de una multa mayor que el costo del libro:
«Para ser sincero, nunca nadie ha pagado un multa mayor al costo del libro, pero el señor McLaren quieren hacer pago por el benificio que le proporcionó»
[Fuente: News.com.au] [Foto CC by Moonlightbulb]
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